Aunque no lo crean, Lindsay Lohan si llegó a la fiesta de cumpleaños de su nueva amiga, Britney Spears. Como verán en las imágenes de ese sábado por la noche, una versión amorfa de niña de las flores hippie llegó a las puertas de “Mr. Chow”, lista para unirse a la fiesta.

Sin embargo, resultó incomoda la sorpresa que se llevara cuando trató de ingresar y curiosamente no lo consiguiera. Según los fotógrafos, la pobre muchacha hizo un largo intento en la entrada, pero de allí no pasó.

Al parecer, Britney Spears no considera del mismo modo que Lindsay Lohan la amistad recién entablada, sobretodo estando Paris Hilton de por medio.

Desde luego, Lindsay no tuvo de otra que subir rápidamente a su auto, antes de que los medios presentes hicieran las preguntas del caso, emprendiendo rumbo hacia su fiesta de respaldo.

Pero ya fuera de la vergüenza que pasó ¿Han notado el terrible vestuario que eligió para la ocasión? Las botas combinadas con el abriguito, el cual si es original le va ocasionar grandes problemas con los defensores de animales (PETA) pueden perdonarse, pero el adorno que lleva en la cabeza si fue la gota que derramó el vaso.

A lo mejor, mientras nosotros culpamos a Britney de no permitirle la entrada, resulta que el local se reservaba el derecho de admisión y al verla así prefirió no hacer el ridículo dejándola entrar. Quien sabe…

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