Luego de la controversia desatada por las últimas presentaciones de Madonna, al fin se logró encontrar a quien diera una falsa alerta de bomba en uno de sus últimos conciertos en Ámsterdam.
Fue nada menos que un cura de 63 años, quien confesó haber llamado por teléfono con la esperanza de detener el acto de crucifixión que noche a noche es llevado a cabo por la cantante.
El padre fue hallado en tiempo record, debido a que tuvo la genial idea de llamar desde su casa, por lo que no fue difícil identificar el número. Pero no se preocupen, a lo más hará servicio comunitario y un poco de penitencia eclesiástica.
Haz click aqui para recibir nuestros videos y fotos en tu email