Resulta, según el diario News of the World, que Britney Spears hizo un video sexual con su esposo Kevin Federline en el hotel Beverly Hills, de una duración de cuatro horas. Claro que en esa época, Britney no dudó hacer el video, pues ilusamente pensaba que el amor de los dos duraría para siempre.

Pero ahora que el amor terminó, The Sun afirma que Federline estaría dispuesto a vender el filme sexual, si Britney no atiende sus exigencias en el divorcio. Incluso dicen que ya han ofrecido a Kevin Federline hasta 40 millones de dólares por la película que sería puesta en Internet.

Dentro de las razonables Kevin – exigencias se dice que está el obtener la custodia de sus hijos, manutención por parte de Spears y la modesta suma de 30 millones de dólares.

Tema que desde luego tiene muy consternada a Spears, quien piensa que la publicación de estas escenas íntimas puede arruinar su oportunidad de retornar al mundo del espectáculo.

Entendemos que hablando de Kevin Federline, era más que obvio que al verse sin un centavo en los bolsillos, pronto sacaría a la luz su verdadero rostro. Pero, en nuestra opinión, aún para esta clase de tipo es algo muy bajo y ruin.

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