Mientras que el publicista de Paris Hilton, Elliot Mintz, dejó a todos atónitos al declarar a TMZ que Britney admira mucho a Paris; día a día podemos ser testigos de cómo esa admiración sigue transformando la vida de esta famosa.

Claro ejemplo dio el New York Post al reportar que Spears ha estado ausentándose a las sesiones de grabación por andar de parranda con “ya saben quien”, pese a las declaraciones contrarias de sus representantes. Afirmando que, el sello discográfico está empezando a ponerse muy ansioso (en el sentido preocupante) y que esto puede perjudicar enormemente su carrera.

Se dice que, por estas fechas, ella debería estar trabajando en Miami y no de fiesta en Los Angeles. Para ser más exactos, debería estar grabando con Pharrell Williams en el Hotel Marlin de Miami, en donde hasta ahora la están esperando.

Por lo que verán que ha Britney no sólo se le olvida ponerse ropa interior, sino también atender sus compromisos profesionales.

Y por si fuera poco, en una de las últimas veces que fue captada por los fotógrafos, se deja ver dando tumbos, en una actitud que aparenta ebriedad. Por suerte esta vez la hicieron usar pantalones, pero claro fiel a su nuevo estilo, salió sin brasier.

¿Resultará que ahora, Britney aparece sin brasier, en protesta por no dejarla mostrar lo suyo? ¿Acaso no se da cuenta de que luego de dos embarazos, el sostén se vuelve algo primordial en la vida de una mujer? ¿No se puede ver al espejo y ver que tiene “cosas” fuera de su lugar original?

En nuestra opinión, la nueva Britney no sólo se está buscando problemas laborales, sino también en la corte, ya que no imaginamos a algún juez que vea razonable dejar a un par de pequeños con una madre que se comporte así. ¿O ustedes si?

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